No será sorprendente la afirmación de que atravesamos tiempos en que la salud, en todo el mundo, se está convirtiendo en un bien de consumo muy apreciado y, en algunos lugares de nuestro planeta, apenas al alcance de muy pocos
Vivimos en un mundo cada vez más global, sobre todo en el ámbito económico y financiero. Pero, desgraciadamente, todavía queda mucho trabajo por hacer para globalizar los derechos.
Organizaciones y movimientos de la Sociedad Civil nacional e internacional de Defensa del Derecho a la Salud.
Su Excelencia Señora Ministra de Salud Nazira Abdula.
Embajadora del Reino de España: Sra. Carmen Bujan,
Su Excelencia Señor Representante de la Unión Europea en Mozambique: Sr. António Sánchez-Benedicto Gaspar,
Señores Representantes: Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), Cooperación Suiza en Mozambique (SDC), Mecanismo de Apoyo a la Sociedad Civil (MASC) y el Ajuntament de Barcelona,
Señoras, señores, queridos invitados y participantes en esta primera Conferencia sobre Determinantes Sociales de la Salud en Mozambique:
No será sorprendente la afirmación de que atravesamos tiempos en que la salud, en todo el mundo, se está convirtiendo en un bien de consumo muy apreciado y, en algunos lugares de nuestro planeta, apenas al alcance de muy pocos. Vivimos en un mundo cada vez más global, sobre todo en el ámbito económico y financiero. Pero, desgraciadamente, todavía queda mucho trabajo por hacer para globalizar los derechos. La salud no es una excepción. Por el contrario, asistimos a una privatización y mercantilización sin precedentes que excluye a muchas personas, que ven cada vez más limitado su derecho a vivir una vida sana. Los movimientos sociales y las organizaciones enfrentan muchas dificultades en crear alianzas globales, con la misma fuerza con que surgen políticas neoliberales, enfocadas en transformar la salud en una mercancía, según la lógica del mercado. Y con eso pretenden, definitivamente, que sólo aquellos que tienen dinero puedan vivir más y mejor.
También, soy consciente de que no resulta novedad para nadie si digo que son precisamente las poblaciones más pobres y vulnerables las que sufren de forma más severa el impacto del cambio climático, las sequías y las inundaciones, las guerras y, una vez más, de las políticas económicas que aumentan las desigualdades.
Ciertamente, también están familiarizados, en uanto personas que trabajan en la salud pública, del concepto de doble carga de enfermedad que sufren las poblaciones con menos recursos, como es el caso en Mozambique: enfermedades transmisibles y enfermedades crónicas. Esto está afectando muy negativamente la esperanza de vida. Aquí, afirmo que los pobres sufren de otra doble carga, aún más grave: la falta de recursos y las políticas deshumanizadas que consolidan la desigualdad. Eso es lo que más afecta su calidad de vida.
Es por eso, y después de 24 años de trabajo en la defensa de un sistema público de salud de calidad en Mozambique, que en medicusmundi proponemos una definición de la salud en la línea de nuestros compañeros del Movimiento de Salud de los Pueblos y que dice: la salud es una cuestión social, económica y política y, sobre todo, un derecho humano fundamental. La desigualdad, la pobreza, la explotación, la violencia y la injusticia están en la raíz de la enfermedad y de las muertes de las personas más pobres y marginadas. La salud para todos significa que intereses poderosos tienen que ser desafiados, que tenemos que oponer a la globalización neoliberal y que las prioridades políticas y económicas deben ser drásticamente alteradas.
Promover una Conferencia sobre Determinantes Sociales de la Salud, en estos tiempos de políticas de salud basadas en el individuo, de programas de salud verticalizados, de privatización de la prestación de la salud, parece ser un evento revolucionario. Pero, por el contrario, estamos proponiendo una cosa muy básica: alcanzar la salud para todas y todos desde un sistema público eficaz. Sólo eso. Estamos proponiendo que la salud esté en todas las políticas y que todas las políticas sean salud.
Creemos que todos los que están aquí presentes entienden que nuestro objetivo es muy simple: (1) En primer lugar, queremos, en todas las áreas, incluyendo académicos, centren su atención en un enfoque amplio de la salud, en el análisis de todos los factores que afectan la calidad de vida de las personas, incluido el propio sistema sanitario, pero también los factores medioambientales, sociales, políticos. Es vital generar información de calidad sobre los Determinantes Sociales para poder incidir de forma efectiva en las políticas de salud; y (2) en segundo lugar, queremos hacer esto con la participación activa de la sociedad, de los movimientos sociales, de los investigadores y de los responsables de las políticas públicas de salud.
Con esta conferencia, queremos oír las voces de las experiencias que normalmente no tienen espacio en el diseño de las políticas de salud en Mozambique.
Me gustaría dar las gracias a todos los participantes, a todos los miembros del Comité Científico, a todos los ponentes, a todos los financiadores (Unión Europea, Cooperación Española, MASC, Cooperación Suiza y Ajuntament de Barcelona), a todos los trabajadores de medicusmundi y al propio Ministerio de Salud y sus recursos humanos que en muchas ocasiones trabajan en condiciones muy difíciles y de forma muy especial a las organizaciones de la sociedad civil y movimientos sociales que con su fuerza reclaman políticas de salud justas y construidas desde y con las personas como centro.
Estamos aquí para crear fraternidad, colaboración y una nueva Alianza de actores que, finalmente, tenga una ideología clara acerca de la salud como un derecho de todas y todos.
Muchas gracias por su atención.